Juan Balboa
Multimedios Ámbar
El grupo paramilitar “El Machete” hacen acto de presencia en Chiapas y reta al gobierno de Andrés Manuel López Obrador: «Si vemos que envían (fuerzas federales) para matarnos y detenernos, para encarcelarnos, es porque forman parte del crimen organizado».
“El Machete” es uno de los doce grupos civiles armados que han surgido en el estado a partir de que se conoció al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) el 1 de enero de 1994.
Los integrantes de “El Machete”, de mayoría indígena, son paramilitares que aparecieron de la nada desafiando al gobierno de López Obrador y creó un bloque de autodefensa ante el avance del crimen organizado en específico de narcotraficantes en el municipio de Pantelhó, ubicado en la región de los Altos de Chiapas.
“El Machete” incursionó en Pantelho, muy cerca de la comunidad de Acteal, municipio de Chenalhó, en donde se registró la masacre el 22 de diciembre de 1997.
Los indígenas que forman parte del “Machete” llegaron a Pantelhó supuestamente para expulsar a criminales que han extendido su poder en la región y proteger a la población.
“Hoy nuestro pueblo está por el nuevo ‘Goliat’, que son los narcotraficantes, sicarios, crimen organizado, pero nosotros somos los nuevos ‘David’, que defiende su pueblo”, señalan en un documento.
“El Machete” llegó el miércoles pasado al poblado de Pantelhó presuntamente para sacar a los sicarios y a narcotraficantes que han ocasionado las muertes de campesinos tseltales y tsotsiles.
El grupo informó que se retiraba de la localidad y advirtió al gobierno mexicano que no enviara a la Guardia Nacional, al Ejército o a la Policía.
“Nosotros, como autodefensas del pueblo, nos retiramos porque no buscamos ni el poder ni el dinero. Para nosotros, una vez libre el pueblo de Pantelhó, dejamos en manos de los agentes y comisariados de cada comunidad para que elijan sus autoridades desde nuestros usos y costumbres”, señaló.
El grupo de autodefensas recordó que desde hace 20 años comenzó su sufrimiento con la presencia de la delincuencia organizada.
Pero fue en el 2002, aseguran, cuando el señor Austroberto Herrera Abarca se quiso autonombrar para ser juez municipal de Pantelhó. Austroberto “le abrió las puertas al crimen organizado, a los narcotraficantes, y así comenzó a matar a todos los que se oponen con sus actividades.
“Vemos que ha matado a un aproximado de 200 personas. Y al principio denunciamos, pero el Ministerio Público nunca tomó en cuenta nuestras denuncias y algunos compañeros fueron asesinados por denunciar la violencia que estamos viviendo”, insistierón.
El grupo denunció que Herrera Abarca, así como Delys Jannet Flores Velasco, presidenta municipal actual de Pantelhó, y Raquel Trujano Morales, alcaldesa electa del municipio, son parte de los narcotraficantes.
Runrún.
Al pie del Cañón
Fuente: Ong´s
Texto y edición: Juan Balboa