La Comisión Sexta del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) envió una carta al Colectivo “Llegó la Hora del Florecimiento de los Pueblos” donde denuncia que la Secretaría de Relaciones Exteriores pone trabas y alarga los tiempos del trámite de pasaporte a quienes lo han tramitado para la travesía en Europa, en donde resalta las conductas racistas por parte de los funcionarios de la cancillería.
“Tanto bla, bla, bla de derechos y reconocimiento de nuestras raíces, y etcétera –incluidos perdones hipócritas pedidos sobre la tierra a destruir-, pero la población originaria, o indígena, sigue siendo tratada como extranjera en su propia tierra”, dice en el texto el subcomandante Galeano.
En la carta enviada al colectivo -que antes fuera la asociación civil que abrazó el proceso de la recolección de firmas para Marichuy-, el sub Galeano detalla que el EZLN decidió cumplir con los requisitos legales “para poder llegar, con nuestro oído y nuestra palabra, a las tierras que Marijose habrá de rebautizar en unos pocos días”.
El Escuadrón 421, delegación marítima, viaja con sus documentos oficiales y además con el Pasaporte Zapatista de Trabajo. Pero la delegación que llegará por aire aún no está completa, pues a muchos les han negado el trámite, han aplazado, les han pedido requisitos que no se piden normalmente.
Han tenido anomalías en su proceso ante las oficinas de Relaciones Exteriores, les han extendido más de cuatro meses la entrega pese a que entregaron todos los documentos y además todas estas trabas han estado caracterizadas con episodios de discriminación y racismo, de acuerdo con la denuncia.
“Podría pensarse que es sólo burocracia, que te toca la mala suerte de topar con alguien que piensa que tiene Poder porque está detrás de una ventanilla, un escritorio, una oficina. Pero no, es también algo más y se podría sintetizar así: racismo”.
Por un lado describen que además de los documentos que piden normalmente y copia, les han pedido identificación de familiares, certificado de secundaria para comprobar que no son migrantes, y hasta el himno nacional les han hecho cantar en las oficinas gubernamentales. Incluso les han pedido presencia de familiares en el trámite, pese a que el trámite oficial debe ser personal.
“Todos esos papeles se presentan, pero el problema es que, a ojos de la burocracia de la Secretaría de Relaciones Exteriores, el color de la piel, el modo de hablar, la forma de vestir y el lugar de procedencia es lo que cuenta. “Al sur del metro Taxqueña, todo es Centroamérica”, dice la carta. “En la Ciudad de México, que se supone “progresista”.
Ahí, una señora, burócrata de la Secretaría de Relaciones Exteriores, rechazó la credencial del INE con un despectivo ‘ésa no sirve para nada, sólo para votar’, y le exigió a la compañera, de más de 40 años de edad, habitante de la Selva Lacandona, su certificado de secundaria, para comprobar que no era guatemalteca.
La compañera alegó: “pero yo vivo de la tierra, soy campesina, no tengo estudios de secundaria”.
La burócrata, altanera y prepotente: “pues no estudian porque no quieren”. “Pero vengo desde Chiapas’, insiste la compañera. “No me importa. A ver, el que sigue”, responde la burócrata. ¿Se excita la burocracia gubernamental al maltratar a indígenas?”, escribe.
En la carta dice que mandaron a un compañero zapatista blanco a hacer el trámite “para probar si era racismo y no sólo burocracia”, y lo logró obtener el mismo día. Continúa la denuncia: “Y no sólo eso: la Secretaría de Relaciones Exteriores retiene el pago que han hecho tod@s l@s compas a quienes se les niega el pasaporte con pretextos y requisitos que ni siquiera están en su página de internet. Ha de estar muy dura la austeridad si es que tienen que despojar a los indígenas de sus dineros”. “A un compañero (más de 60 años de edad) lo cuestionaron: ‘¿No será que quieres ir a Estados Unidos a trabajar?’ El compa respondió: ‘No, ahí toca luego, en otra vuelta. Ahorita nos toca Europa’. El funcionario, cual Tribunal Federal Electoral, se lavó las manos y lo mandó a otra ventanilla. Ahí le dijeron: ‘Eso está muy lejos y es caro el viaje, no puede ser que tengas el dinero necesario porque eres indígena. Tienes que traer el estado de cuenta de tu tarjeta de crédito.
En su relato, describe el caso de dos mujeres tseltales de la Selva Lacandona que viajaron a Ciudad de México, a quienes hicieron regresar a su casa por un error de ortografía en las actas de nacimiento. Ambas regresaron a la selva y de nuevo a la ciudad con nuevos papeles para demostrar su identidad, y de ahí las hicieron esperar en lo que comprueba la SRE que sí son mexicanas. “Si tienen tiempo, hagan ustedes esto: imaginen que nacieron con la piel oscura, que son de ascendencia indígena y que son de algún estado del sureste mexicano. Ahora vean los requisitos para obtener el pasaporte (…) Y aún cuando ustedes tengan cualquiera de, o todos, estos requisitos, si es de piel oscura, habla muy otro, y se viste ‘como la India María’ (textual de una funcionaria de la SRE), se va a enfrentar con algo como: ‘no, necesitas traer tus calificaciones del kínder, de la primaria, secundaria, preparatoria –CCH no, los de ahí son grillos-, diplomado, curso de superación personal en NXIVM, y una carta de buena conducta del prefecto de disciplina”, denuncia irónicamente el subcomandante Galeano. “Lo paradójico de todo esto es que es@s indígenas a quienes les niegan el INE o el pasaporte están luchando también por la vida de es@s burócratas que creen que sirven “a la Nación Mexicana” rechazando lo que les viene en gana”.
El EZLN siempre ha considerado el “territorio que llamamos México” como un lugar donde comparten su lucha con pueblos indígenas que también despertaron desde el levantamiento de 1994, e incluso usan la bandera nacional invertida, poniendo primero el rojo y al último verde, como en los diálogos de San Andrés.
El Pasaporte Zapatista de Trabajo
El lunes, en un comunicado, el EZLN dio a conocer el “pasaporte zapatista de trabajo” que lleva el Escuadrón 421, delegación marítima zapatista, que en pocos días llegará al Puerto de Vigo, en el Estado Español.
En él, además de describir en qué se han especializado las siete integrantes de la delegación, ponen siete limitantes que tienen quienes lo portan respecto a su trabajo a realizar en territorios que no son Zapatistas.
Este es un documento avalado por las Juntas de Buen Gobierno de los Caracoles y por los Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas.
“La, el o loa titular de este documento deberá conducirse en todo momento respetando las diferencias de identidad, sexo, credo, lengua, cultura e historia, de las personas y lugares donde realice el trabajo para el que se expide el presente documento”. Resalta que no pueden pedir dinero, usar o solapar el uso de armas, o que al emitir comentarios personales no representan la voz de los pueblos en rebeldía organizados en el EZLN.
“Las páginas subsiguientes están en blanco, para que las diferentes personas, grupos, colectivos, organizaciones y movimientos, de los distintos rincones de los disímiles mundos que se visiten, sellen, firmen, adornen, huellen, pongan dibujos, rayen o lo que sea para que el, la o loa compa tenga una especie de guía de dónde estuvo, además de los apuntes en su cuaderno, cuando regrese y platique cómo le fue.”, dice el comunicado.
Multimedios Ámbar.
Runrún.
Al pie del Cañón
Juan Balboa