«No tengo que renunciar a ninguna parte de mí. Por el contrario, puedo ser yo misme cada día».
En 2016, B. Pagels‑Minor, gerente sénior de Productos de Datos, se declaró trans no binarie. Durante los últimos cinco años, ha emprendido un viaje para convertirse en la persona que sueña poder ser, desde definir sus pronombres hasta someterse a una cirugía de confirmación de género en 2021. Con la ayuda de los beneficios de Netflix, B. también pudo utilizar la fecundación in vitro y, si todo sale como espera, le dará la bienvenida a su bebé hacia finales de este año.
En Netflix tenemos muy presente la perspectiva de inclusión, ya sea con nuestros empleados, los equipos creativos que hacen nuestras series y películas, o nuestros miembros en todo el mundo. Queremos que las personas que empleamos puedan verse reflejadas en todo lo que hacemos, desde lo que llega a la pantalla hasta los beneficios y el apoyo que les brindamos.
Como se muestra en el video anterior, hay ejemplos de todas partes sobre las maneras en que un enfoque de beneficios inclusivo puede impactar y cambiar vidas. Y que siempre hay oportunidades para mejorar. Hace unos años, nuestro grupo de padres, madres y colegas trans, no binarios, de género no conforme y de la reserva del Ejército empezaron a hablar sobre algunas limitaciones y brechas en nuestros beneficios. Gracias a ello aprendimos que:
- Las barreras en los servicios de apoyo para familias en formación como la fecundación, la adopción y la gestación subrogada variaban según el género, el estado civil, la edad y la orientación sexual.
- Si bien los servicios de atención trans como la cirugía de confirmación de género y la terapia de reemplazo hormonal estaban cubiertos por el plan de salud de Netflix, no sucedía lo mismo con otros servicios, como la terapia de voz, las lecciones de voz, la electrólisis y la condrolaringoplastia (o afeitado traqueal).
- Era difícil acceder a atención médica trans debido a diversos obstáculos, como los procesos administrativos y la falta de protecciones estatales y federales en EE. UU.
- A nuestros empleados de la reserva del Ejército les preocupaban sus ingresos durante el servicio activo.
Estos desafíos nos llevaron a replantearnos la situación y a implementar nuevos beneficios para las familias en formación, cobertura trans y licencia militar remunerada que facilitaron el acceso a los beneficios por parte de nuestros empleados:
- Independientemente del género, el estado civil, la edad, la orientación sexual de nuestros empleados o el lugar del mundo en el que vivan, cubrimos hasta USD 75 000 en apoyo a las familias en formación. Esto puede aplicarse a una amplia gama de necesidades, desde procedimientos médicos hasta el pago de honorarios legales.
- En EE. UU., cubrimos una gama completa de beneficios de atención médica trans, además de aquellos establecidos por la Asociación Mundial para la Salud Transgénero (WPATH). Esto incluye operaciones, además de apoyo para la salud mental, terapia de voz y más.
- En todo el mundo, cubrimos el pago completo del salario de los empleados durante los periodos de reserva y en servicio militar activo.
Aún nos queda más por aprender. Por ejemplo, actualmente estamos buscando cómo apoyar mejor a nuestros empleados en materia de salud mental. Como parte de esta iniciativa, hemos llevado a cabo conversaciones sobre salud mental con nuestros Grupos de Recursos para Empleados y estamos analizando cómo podemos hacer que el acceso a la atención de salud mental de calidad sea más fácil y asequible.
Buscamos inspiración en todas partes y también esperamos que nuestro trabajo pueda extenderse más allá de Netflix. Descubrimos que la mejor manera de aprender y crecer es:
- Escuchar las historias de nuestros empleados y abogar en su nombre para motivar al cambio.
- Asociarnos con proveedores de beneficios que tengan una visión inclusiva.
- Aportar crítica constructiva y no limitarnos a los estándares tradicionales de la atención.
Los beneficios deberían funcionar para todos, independientemente de cómo se identifica cada persona. Cuantas más empresas ofrezcan beneficios inclusivos, más personas como B. podrán presentarse a su lugar de trabajo todos los días con la mejor expresión de sí mismas.
Estos son los cortometrajes ganadores de nuestra nueva iniciativa «Diversidad en serie: historias que merecen ser contadas»
Un niño nacido en el espacio exterior que tiene que adaptarse a la humanidad; un peculiar vidente que saca lo peor de nosotros y una aterradora distopía donde todos los humanos son iguales, tanto en su forma actuar y hablar, como en su apariencia.
Estas tres particulares sinopsis corresponden a los proyectos ganadores de la primera edición de «Diversidad en serie: historias que merecen ser contadas», impulsada en España en asociación con Fad (Fundación de Ayuda contra la Drogadicción). A lo largo del año académico que pasó, Netflix y Fad invitaron a más de 600 estudiantes de entre 12 y 20 años a participar de talleres educativos centrados en ayudarlos a reflexionar sobre la riqueza del mundo que los rodea. Esto se implementó mediante sesiones en las aulas, donde se trataron asuntos como la educación en diversidad, las habilidades comunicativas, el trabajo en equipo y la capacitación audiovisual. Más tarde, se les encargó desarrollar el guion de un cortometraje que abordara el tema principal del proyecto: la diversidad, específicamente la diversidad cultural, la igualdad de género y la diversidad intergeneracional.
El objetivo de la iniciativa fue despertar las ambiciones artísticas de estos jóvenes estudiantes, con la esperanza de que estas acciones ayuden a generar consciencia a una edad temprana y permitan forjar un futuro más diverso, tolerante y equitativo en la industria audiovisual.
Los guiones ganadores fueron elegidos por un jurado multidisciplinario integrado por profesionales de Fad, Netflix y CIMA (Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales), así como por expertos del ámbito educativo. Entre ellos Verónica Fernández, directora de Contenidos de Netflix en España; la autora y creadora Elísabet Benavent; Cristina Andreu, presidenta de CIMA; Beatriz Martín Padura, CEO de Fad; y José Luis Amo, docente del Colegio Gredos San Diego Las Suertes de Madrid y especialista en diversidad.
«Fue una experiencia hermosa y entretenida que atesoraremos para siempre», afirmaron los guionistas de Con los pies en la Tierra, Paula Ñeco Fife y Juan Steban Ospina Brand (de 16 y 17 años), que asisten al IES Renacimiento.
«Aprendimos la importancia, la dedicación y el esfuerzo que demanda el rodaje de una película», relataron Alejandra Godoy Prieto y Sara Sáez López (de 14 años) del colegio San Patricio El Soto, guionistas de El Bucle.
«Cada uno de nosotros somos un pequeño mundo, diferente, único e irrepetible. Todas, todos, tenemos derecho a serlo. Sé y deja ser» es la frase que cierra La bola mágica, el cortometraje creado por Alba Esteban Mayor, Lucía Marchado Mora, Irene Bruna Sosa, Inés Martín Sánchez y Andrea Polo Jiménez (todas de 14 años) del IES Luis García Berlanga.
Las producciones fueron proyectadas y celebradas en un festival de cortos al que asistieron alumnos y docentes en representación de los grupos escolares ganadores y que contó con la participación de la vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Transformación Digital de España, Nadia Calviño.
También participaron las integrantes del jurado Elísabet Benavent, Cristina Andreu y Beatriz Martín Padura, así como representantes de Netflix y Fad: el vicepresidente de Contenido Original de Netflix en España y Portugal, Diego Ávalos, y el presidente de Fad, Ignacio Bayón.
«Hay que escuchar a los jóvenes, a los niños y a las niñas. Nosotros podemos indicar y pensar algunas herramientas, pero ellas y ellos están mucho más avanzados de lo que nosotros creemos; viven en un mundo más diverso. Por eso es tan importante este proyecto», afirmó Cristina Andreu durante la ceremonia de premiación. «Tendemos a tratar con cierta condescendencia a la gente muy joven. Creo que las nuevas generaciones vienen muchísimo más preparadas. Tienen mucho más integradas algunas nociones que a nosotros nos cuestan un poco más. Tienen muchísimas cosas que contarnos a la hora de encontrarnos con un futuro mejor», agregó Elísabet Benavent.
La iniciativa «Diversidad en serie: historias que merecen ser contadas» tendrá su segunda edición durante el período lectivo que abarca los años 2021 y 2022, en la que podrán participar estudiantes de entre 14 y 20 años de todos los rincones de España.